Hoy va a ser un poco complicado dar un testimonio de lo que ha sido la ruta. Empezaré narrando como ha sido y luego daré mi opinión personal.
Eran las 7 cuando salíamos en dirección a Algimia, pasado el pueblo y a unos pocos km dejamos los coches aparcados al lado de la carretera y comenzamos la ruta, bajando al barranco y siguiendo por una preciosa senda que transcurre por el mismo. Llegamos a una bifurcación, ¿derecha o izquierda?, por la izquierda nos fuimos, cuando pudimos contactar con el grupo, nos dimos cuenta que no íbamos bien, pues era el camino de retorno, así es que estábamos dando la vuelta al revés, en ese caso llegaríamos a la fuente de la Parra demasiado pronto, casi era hora de desayunar, por lo que a petición popular se decidió subir al pico de Espadan.
Subimos hasta la cima y se podían ver unas vistas fabulosas pues estaba muy despejado, se veían Peñagolosa, El Pina hasta las islas Columbretes, después de la foto de grupo en todo lo alto, nos bajamos a almorzar a la fuente de la Parra, el almuerzo sin comentarios.
Seguidamente nos fuimos a buscar el barranco Malo por donde teníamos que haber subido, fuerte subida para llegar al mismo y también la bajada, incluso peligrosa por la cantidad de piedras sueltas que resbalaban un montón. Una vez en el barranco, la senda esta muy tupida de vegetación lo que nos hizo ir en cuclillas para poder pasar por algún tramo. Perdimos a tres componentes del grupo, que en un descuido se enfilaron por el lecho del barranco y no vieron que la senda iba por la ladera, casi al borde del lecho. Una vez reagrupados llegamos a la bifurcación del principio y regresamos por el mismo camino hasta coger una senda que salía a nuestra derecha y que subía a unas ruinas y desde allí a la cueva del Estuco. Una vez en las ruina seis de los componentes se fueron a los coches y los demás nos dirigimos en constante subida hasta la cueva, una vez allí entramos a visitarla. La entrada es muy estrecha y resbaladiza, gracias a una cuerda que hay colocada allí permite la bajada mas segura, una vez dentro se abre una bóveda muy grande, llena de estalactitas y con un agujero en lo alto por donde entra el sol y da luz a la cueva. Valió la pena el esfuerzo, ya que no esperábamos que fuera tan grande ni tan vistosa.
Llegamos a los coches donde nos esperaba Emilio, nos refrescamos en la fuente, despedidas y hasta la próxima.
A mi personalmente me a gustado. Aunque no dejo de pensar que no deberíamos haber subido al Espadan, por que nos a retrasado por lo menos una hora, ya que pretendíamos acabar pronto y no coger las horas de más sol, y además la ultima subida a la cueva es bastante fuerte, contando que ya llevábamos muchoandado y subido.
Km....16,700
TM.....4:06h
TD......2h
AT......920m
PD. Me alegro de haber compartido camino con nuestro amigo Vicente Mauri que hacia mucho que no nos acompañaba.
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